Un pequeño gato, llamado Tater Tot, ha conmovido luego de que sus patas tuvieran que ser enyesadas y demostrara sus ganas de sobrevivir a su difícil condición.
El tierno felino fue rescatado por Bebé, un perro de cruce de terranova que no dudó en advertir a su dueña de lo que había descubierto.
Pero el pequeño minino no estaba solo, ya que lo acompañaba su hermanito que no sobrevivió. Sin embargo, Tater Tot fue llevado a Kitty Crusade, una fundación de gatos que se encargó de brindarle todo lo necesario para que tuviera otra oportunidad de vida.
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Un gatito con patas delanteras enyesadas lucha por su vida
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El gato tuvo que ser enyesado porque los veterinarios evidenciaron que sus dos patas delanteras estaban torcidas; pero eso no es todo porque el animal tampoco podía alimentarse con facilidad, ya que tenía el paladar hendido.
Esta condición se produce durante el nacimiento del bebé, en donde el tejido del paladar no se cierra y deja una abertura en el mismo.
Aunque al principio le fue difícil comer, poco a poco el gato se fue acostumbrando a alimentarse y desplazarse con los yesos en sus patas.
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La co-directora de la organización, Ash Houghton, mencionó que desde que el animal llegó a la entidad todos se dieron cuenta que el gatito siempre quiso luchar por su vida.
“Desde el primer día, pude ver que Tater tenía muchas agallas, mucha motivación. Y mientras él luche por mantenerse con vida, seguiremos luchando por él”, dijo.
La mujer al ver al tierno felino decidió compartir a través de las redes sociales su historia para concientizar la importancia de cuidar a los animales.
De esta forma, las fotos de este gato con sus patas enyesadas se han convertido en todo una sensación en las redes; pero los veterinarios ya le quitaron los yesos y el animal logró caminar por su cuenta.