Un reciente estudio trajo una mala noticia para los amantes del té, debido a que consumirlo frecuentemente cuando está demasiado caliente puede aumentar a casi el doble el riesgo de desarrollar cáncer de esófago.
De acuerdo con los resultados de la investigación publicada por la International Journal of Cancer, quienes beben té a más de 60 grados centígrados y consumen 700 mililitros diariamente o dos tazas grandes, tienen 90 % de posibilidades de padecer cáncer en comparación con quienes toman menos cantidad y a menor temperatura.
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La muestra que se tomó para el estudio se efectuó en más de 50.000 personas en Golestan, una provincia iraní y con anterioridad otras investigaciones habían determinado que existe un vínculo entre ingerir té caliente y el cáncer de esófago.
Este estudio más reciente fue el primero en entregar una temperatura precisa como perjudicial, según explicaron los autores.
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Este tipo cáncer en el esófago es el octavo más común en todo el mundo y suele ser mortal, pues las estadísticas de la Agencia Internacional para la Investigación del Cáncer revelan que ha matado a al menos 400.000 personas anualmente.